La crisis social que a diario vemos en las calles, en los noticieros y quizás por todas partes, es un espejo que refleja la convivencia (crisis social) que al interior de las copropiedades hemos venido evidenciando en los últimos años, pero que no ha estallado por falta de la actividad de primera línea en cabeza de los jóvenes.
Adultos y Adultos Mayores quienes tenemos en nuestras manos las copropiedades no hemos tenido la capacidad de acción y reacción de la primera línea que con lujo de detalles los jóvenes han venido gestionando y mucho menos, pensar en la posibilidad de puerto resistencia en la Propiedad Horizontal para transformar la realidad o crisis social que en materia de convivencia o relaciones de vecindad son un eterno ciclo repetitivo que año tras año evidenciamos con cada nueva administración.
Somos una generación conformista, somos una generación que no hemos sido capaces de interiorizar el bien común como principio de vida en la copropiedad.
Resistencia vs Resiliencia
La resistencia es una de las capacidades físicas básicas, particularmente aquella que nos permite llevar a cabo una actividad o esfuerzo durante el mayor tiempo posible. Una de las definiciones más utilizadas es la capacidad física que posee un cuerpo para soportar una resistencia externa durante un tiempo determinado.
Mientras que la resiliencia es la capacidad de todo ser vivo de superar la adversidad.
Cuando somos resilientes somos capaces de dejar atrás, somos capaces de superar las relaciones de vecindad que nos han afectado de una o de otra manera, somos capaces de perdonarnos nuestros propios errores, y de igual manera perdonar los errores de los demás, somos capaces de superar el odio, el rencor, la rabia y transformamos nuestro entorno a través del bien común como filosofía de vida.
Si bien es cierto puerto resistencia en propiedad horizontal como metodología para transformar la crisis social es una posibilidad, Puerto Resiliencia en Propiedad Horizontal a través del perdón es una mucho mejor alternativa al interior de las copropiedades.
Y es un símil bastante válido: la primera línea en Puerto Resiliencia en Propiedad Horizontal tiene en el perdón la herramienta fundamental de transformación social acompañada del bien común como estructura fundamental.
No es la responsabilidad de unos pocos en el conjunto residencial, es la responsabilidad de todos y cada uno de nosotros.
El bien común es una cultura, es una costumbre o estilo de vida que como parámetro nos guía, en una misma línea que el espíritu del legislador de la Ley 675 de 2001, Régimen de Propiedad Horizontal en Colombia, en donde bien común prima sobre el bien privado, dicho en otras palabras, las responsabilidades que adquirimos con las zonas comunes de la copropiedad, priman sobre las responsabilidades que adquirimos como propietarios de un inmueble.
En ese orden de ideas las expensas comunes o cuota de administración es sagrada, es una responsabilidad de primer orden, de la misma manera nuestro voto para la toma de decisiones en la asamblea anual es parte fundamental de esa cultura del bien común.
No es pensar en pagar menos cuota mensual, es entender que, si tomamos buenos decisiones para el bien común, la copropiedad en optimas condiciones es un gran beneficio para la calidad de vida y el bienestar de la comunidad residente sin olvidar que valoriza la copropiedad.
Múltiples estrategias son posibles como solución, por eso abrimos nuestro canal a disposición de cada uno de nosotros, dolientes o tenedores de un inmueble en propiedad horizontal bien sea como propietario o como arrendatario, cuéntenos sus experiencias, si las compartimos quizás en otros conjuntos esa puede ser una excelente opción. Escribanos al email: barriosyvecinos@gmail.com y/o al WhatsApp 3192502319
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